Noche de Oriente

Una caricia de Wind chimes
resuena en la oscuridad
acompañada
de la dulce melodía
de una dócil flauta india.
Y en el claroscuro de esta noche
entre las cortinas de lino
me apareces Venérea
vestida sólo
de tus ojos de hielo
que me calientan el corazón.
Silencio....
...Una pausa, ningún movimiento,
una mirada recíproca
para traspasar el muro de la oscuridad.
En el aire saturado e inflado de deseo
te siento llegar
en mitad del estómago
como un violento puño
cuando te mueves hacia mí
con paso felino
y me inyectas promesas de amor
yaciendo dentro de mí
sobre el fondo de éste Tatami.